En un barco con 300 toneladas hay 6626 tiburones (de la información que entendemos es por pesca acumulada en diferentes
partes del Pacifico; supongamos de un trimestre).
Al momento, hoy en aguas internacionales colindantes
al norte de las áreas de Uso Exclusivo Económico del Perú hay como 245 naves (detectables
con el AiS; quizás hayan más ) de lo que
como cualquier usuario del website de
Maritime Traffic observamos. De esas, identifica el sistema como “cargueros” (en un
diferente color) un 10%.
Esto nos proyecta los siguientes números:
Si un carguero tenia 6626 tiburones, 24 cargueros, potencialmente
tendrían: 159024 tiburones. Un margen
del 10% de error a estos cálculos básicos, nos proyecta que esta flota tendría
no menos de 143000 tiburones, sin
contar los que estarían a bordo de los
otros barcos pesqueros (221 naves de solo un grupo especifico), que son la
mayoría, así como los que en este momento…. en este instante… están capturando
y faenando.
No estoy en contra de la pesca, es necesaria para un
mundo del siglo XXI. Rechazo la pesca ilegal, ya que aun siendo en aguas
internacionales captura especies prohibidas o protegidas, y viola áreas
demarcadas por cada país y zonas protegidas a “Evitar” marcadas en todas las
cartas de navegación del mundo.
De lo que sé, los tiburones (al igual que la gran
mayoría de peces) son migratorios. Galápagos por sus características especiales
tiene las condiciones ideales de reproducción, pero a la larga estas especies
se mueven por todo el océano. Es decir, estamos cuidando un recurso que a la
larga esta flota, al igual que tantas otras flotas están pescando, incumpliendo
tratados y convenios de protección de
especies en extinción.
No me atrevo a señalar con más precisión cifras (las
mías son de un ciudadano que accede a la información publicada en medios), pero sé que los expertos en pesca, biología,
y estadísticas tendrán cifras sustentadas, y que con certeza demostrarían
brutales impactos a la vida oceánica, donde estos números hablan de millones de
tiburones que trimestralmente capturan.
El imponer esta multa a la empresa pesquera de China
por U$ 5’9MM, cómo el Estado ecuatoriano logrará cobrarle?
Esta sentencia ecuatoriana debería viabilizarse a la
instancia que corresponde en la CONVEMAR, al Gobierno chino… a través de
canales diplomáticos?
La empresa china a través de sus abogados apelará
esta sentencia dentro del poder judicial del Ecuador?
El gobierno chino podrá exigir a dicha empresa
pesquera que cumpla al estado ecuatoriano?
Existirá voluntad política en China (en este caso
ellos, pudo ser un barco de alguna flota española, coreana, panameña, japonés,
rusa…) para exigir el cumplimiento de una sentencia ecuatoriana, y en un caso
posterior (en el mejor de los escenarios) de una sentencia internacional?
Los otros intereses de empresas o sector financiero
chinos así como del mismo gobierno chino con el Ecuador, permitirá que
geopolíticamente fluya todo esto?
En derecho internacional hay la responsabilidad
compartida?
Son muchas preguntas que tengo, y estoy seguro que
algunas me responderán. Es un largo
camino la protección del océano, donde más allá de los enunciados de “cuidemos
el mar”, debe el Estado ecuatoriano en trabajar y crear propuestas de aumentar el marco sancionatorio, así como
internacionalmente ante los organismos mantener
una postura en que deben alinearse las normas para que la pesca y protección que hacen otros países en los océanos y a áreas a evitar, pueda ser más real y
efectiva.
En este momento hay muchos barcos matando miles y
miles de tiburones…., pero nunca debemos rendirnos ni perder la esperanza.